Ohhh…. blanca Navidad, sueño y con la «arena» alrededor. Es el villancico que deben cantar en el Hemisferio Sur cuando se acerca la época de Papá Noel. Y es que, mientras nosotros no concebimos la Navidad sin grandes jerseys de lana, nieve, chimenea, trineos y escapadas para hacer ski, hay lugares del mundo en que reciben el Año Nuevo en bañador.
El Hemisferio Norte es el que celebra la Navidad tal y como la conocemos ya que al llegar esta época, las temperaturas bajan y las celebraciones se realizan acorde a este clima. Sin embargo, en el Hemisferio Sur ocurre todo lo contrario: para ellos en diciembre suben las temperaturas y se encuentran con la mejor época del año para disfrutar de la playa y de sus días libres. Del mismo modo que en el Norte tenemos unas costumbres adaptadas al clima, en el Sur han hecho lo propio y sus tradiciones navideñas van acorde al tiempo.
¿Te imaginas comer las uvas en Noche Vieja en bañador y darte un baño en la playa para celebrar la llegada del nuevo año? Y no hablamos como lo dicen en San Sebastián, sino con una temperatura del agua por encima de los 24 grados en la que es un placer bañarte y no tiene el mérito de los que lo hacen en La Concha el 1 de enero.
Por ejemplo, en Brasil celebran el día de Noche Vieja en la playa vestidos de blancos y celebrando una ceremonia muy particular: encienden velas y lanzan al mar barcos con flores y regalos. Además, la tradición manda que para disfrutar de buena suerte el año siguiente, hay que meter los pies descalzos en el mar al llegar la media tarde.
El clima también afecta al menú, que en el Hemisferio Sur es diferente. Por ejemplo, si le ofrecemos a un australiano un consomé de Navidad, lo rechazará sin rechistar y a cambio, nos ofrecerá desde Bondi Beach una rica ensalada más acorde a las altas temperaturas. Por su parte, Santa Claus, Papá Noel… tiene una jornada de trabajo muy dura esa noche y viaja alrededor de todo el mundo llevando sus regalos pero, los renos que nosotros conocemos tienen jornada parcial. En Australia, The Jolly Swagman, (que es como llaman a Papá Noel), va acompañado de seis canguros blancos, los White Boomers. Además, se viste para la ocasión con sombrero, camiseta de tirantes azul marino y con amplios pantalones cortos… que tampoco es necesario pasar calor 😉
El clásico abeto de la Navidad también tiene su homólogo en el Hemisferio Sur. Sin embargo, no lo adornan los típicos espumillones que podemos ver en cualquier hogar de la zona norte sino que las frutas tropicales son las protagonistas. En Nueva Zelanda por ejemplo, directamente eligen un árbol que viene con las flores rojas incorporadas, el Pohutukawa. Por su parte, en Sudáfrica, le dan un toque muy particular con la incorporación de adornos hechos con alambre que representan figuras típicas de la cultura africana.
Sin duda, el Planeta es tan grande como curioso y sin duda alguna, merece la pena visitar alguno de estos lugares en Navidad. Ya sabes, allá donde fueres, haz lo que vieres por lo que te animamos a ponerte el bañador y comer las uvas en la playa. Sin duda, una experiencia que merecerá la pena.