Aunque muchos, no tengan claro dónde ubicar Zimbabwe en el inmenso mapa de África, este gran desconocido es una gran alternativa para aquellos que buscan destinos auténticos, sin masificar y repletos de lugares que merecen una visita. Hoy en en blog de Club Marco Polo te contamos todo lo que tienes que saber de Zimbabwe antes de viajar allí.
¿Qué tengo que tener en cuenta?
Empezamos por la parte práctica que necesitaremos saber para poder viajar a este país de África: las vacunas. Actualmente, no es necesario vacunarse para viajar a Zimbabwe. En algunas zonas, existe riesgo de paludismo (malaria) de noviembre a junio aunque este, es mínimo tal y como indica el Ministerio de Sanidad.
Si no te defiendes en shona o en ndebele, no te preocupes: el tercer idioma oficial es el inglés así que no tendrás problema para comunicarte ni para moverte. En cuanto a la moneda, es el dólar zimbabuense por la que 1€ equivale a 404,113 ZWD aproximadamente. La religión mayoritaria es la cristiana aunque en algunas zonas, se mezcla con la indígena.
Por último y no menos importante: el visado. Se necesita un visado de turista con una validez máxima de tres meses y los ciudadanos españoles pueden obtenerlo en la frontera por 30 USD. Si necesitas más información, la encontrarás aquí, aunque recuerda que en Club Marco Polo, te informaremos de todos los detalles si reservas con nosotros.
¿Qué voy a descubrir en Zimbabwe?
¡Muchas cosas! Te vamos a contar las principales aunque por supuesto, a tu vuelta nos detallarás muchos más detalles 😉
En primer lugar, y como no podía ser de otra forma, las Cataratas Victoria. Esta maravilla natural de África está ubicada al sur del país y miden 1,7 km de ancho y 108 m de alto por lo que se consideran un auténtico espectáculo por el estrecho y raro abismo en las que el agua cae. Localmente, se las denomina Mosi-oa-Tunya que significa: «el humo que truena».
Otra parada imprescindible es el Parque Nacional Hwange, la mayor (y probablemente mejor), reserva de animales de todo Zimbabwe. Allí habita la vida salvaje en total libertad: más de 400 tipos de aves conviven con los cinco grandes (el león, el leopardo, el elefante, el rinoceronte y el búfalo) en un parque con una biodiversidad excepcional.
Tal vez, Zimbabwe no sea tan desconocido y es que tiene nada más y nada menos que el Lago artificial más grande del mundo (en volumen), se trata del Lago Koriba, que se formó en 1958. Se creó como consecuencia de que la presa del río Zambeze originara un enorme mar interior.
Bulawayo es la segunda ciudad de Zimbabwe, por detrás de su capital, y como tal, cuenta con diferentes enclaves que merecen una visita. De hecho, es una ciudad más turística que Harare ya que conserva muchos monumentos coloniales. Es recomendable visitar el Parque Nacional de Matobo o Matopos que se encuentra muy cerca, a escasos 35 kilómetros y que si por algo destaca, es por las pinturas rupestres de Nswatugi, una civilización perdida. Está formado por enormes piedras de granito amontonadas que crean en un equilibrio fantástico e imposible.
A estos lugares, hay que añadir el Gran Zimbabwe, Patrimonio de la Humanidad y restos del centro neurálgico de una civilización conocida como el Imperio Monomotapa, cuyos dominios alcanzaban hasta Mozambique. Allí se encontró el Gran Pájaro Sagrado, que hoy por hoy es el símbolo del país y está presente en su bandera. Estas ruinas se dividen en tres grupos arquitectónicos distintos, Conjunto de la colina, Conjunto del valle y la Gran cerca y ocupan hasta 150 kilómetros de extensión.
En último lugar, la capital del país, Harare que, lejos de cumplir con el prototipo de ciudad africana que imaginamos, es una urbe muy sofisticada, industrial y contemporánea. Sus colores combinan a la perfección con el verde de sus árboles y las casas coloniales de la ciudad. Entre sus visitas obligatorias, destacarían la Galería Nacional de Zimbabwe, el Robert McIlwaine Recreational Parck, (con un lago y una reserva de leones) y el Jardín Botánico.
Aunque Zimbabwe pueda parecer un gran desconocido, te aseguramos que son muchos los motivos por los que te sorprendería. Por ello, no pierdas la oportunidad de descubrir un destino casi virgen para los turistas, pero rico en reclamos para visitarlo.