¿Qué animales son autóctonos de la Antártida?

Viajar a la Antártida parece un sueño imposible de alcanzar, pero nada más lejos de la realidad. No hace falta ser científico o explorador para pisar el suelo helado del sexto continente. La Antártida es el único lugar del mundo donde no existen fronteras, ni policías, ni guerras. En sus 14 millones de metros cuadrados conviven personas de todas las nacionalidades unidas por un fin común: la investigación científica. El continente más austral del planeta acoge, asimismo, muchas especies únicas y curiosas. Estos son los animales autóctonos de la Antártida. 

Animales autóctonos de la Antártida

La Antártida es el continente más frío e inhóspito de nuestro planeta. Allí no existen las ciudades tal y como las conocemos. Únicamente hay bases científicas en las que se recopila una valiosa información sobre la flora, la fauna y el cambio climático de la zona. 

La fauna antártica actual es producto de una serie de adaptaciones, que se rigen principalmente por la regulación de la temperatura corporal. Los animales que viven en la Antártida se caracterizan por tener el cuerpo mayor que el de otras especies que viven en zonas más cálidas. Para poder sobrevivir en la Antártida, los animales se han adaptado de manera que son capaces de acumular grandes cantidades de grasa bajo la piel, a fin de evitar pérdidas de calor innecesarias. Estos son los animales autóctonos de la Antártida que seguro te van a sorprender. 

Pingüino emperador

El pingüino emperador es característico de la costa norte del continente antártico. Este animal está clasificado como especie amenazada, debido a la disminución de su población en los últimos años a causa del cambio climático. Los pingüinos emperadores se alimentan de peces, krill y cefalópodos. Forman sus colonias entre marzo y abril, y ponen los huevos sobre el hielo entre mayo y junio. 

Leopardo marino

Esta especie se distribuye por las aguas antárticas y subantárticas. Son animales solitarios y las hembras son de mayor tamaño que los machos. Los leopardos marinos copulan en el agua, pero nunca se han visto. Sus crías suelen nacer entre noviembre y diciembre. Estos animales son conocidos por ser grandes cazadores de pingüinos, pero se alimentan también de peces, cefalópodos, krill y otras focas. 

Ballenas

De las 80 especies de ballenas que existen en el mundo, 14 son autóctonas de la Antártida (ballena azul, la ballena de aleta, la ballena minke, la ballena sei, la ballena de nariz de botella y las orcas, entre otras). Esta especie estuvo seriamente amenazada por el hombre cuando a principios del siglo XX su caza diezmó considerablemente sus poblaciones. Hoy día, muchas de ellas han logrado recuperarse. No obstante, la ballena azul sigue estando clasificada como especie en peligro de extinción. 

Págalos

Los págalos son un ave muy parecida a la gaviota común. Con la salvedad de que su tamaño es más grande y su pelo más oscuro. Los págalos se caracterizan por ser unas aves de potentes alas, bastante agresivas, ya que atacan a otras especies de aves marinas para robarles la comida. 

Cormorán

El cormorán antártico es uno de los animales exclusivos de la Antártida. Tienen los ojos azules y un tamaño que ronda los 80 cm con un peso de 3.5 kilos. Curiosamente, el cormorán tiene unas plumas que no son del todo impermeables, por lo que cuando se mojan su cuerpo pesa más facilitándoles la inmersión. 

Krill antártico

Este es el animal más pequeño de toda la Antártida. El krill es conocido por ser el principal alimento de muchas especies de animales antárticas. Se trata de un crustáceo de cuerpo translúcido con tonalidades rosadas y partes amarillas en su zona superior. 

Otros animales de la Antártida son:

• Petrel. 
• Pingüino de Adelia.
• Pingüino Rey. 
• Pingüino Rockhopper. 
• Pez plateado. 
• Foca de Ross. 
• Gorgonias.
• Tiburón durmiente del sur. 

¿Qué animales son más fáciles de ver si se visita la zona?

Todo dependerá de su época de cría. Por ejemplo, las ballenas llegan en verano, mientras que otras especies lo hacen en primavera u otoño. Lo más aconsejable es dejarse guiar por los expertos que allí residen, para poder observar a estos animales más de cerca. Ellos conocen sus hábitos y costumbres mejor que nadie. 

¿Son peligrosos?

Todo animal salvaje dentro de su hábitat puede ser peligroso. Para observar los animales de la Antártida no es necesario acercarse demasiado. Únicamente, los investigadores científicos lo hacen y toman las medidas preventivas necesarias. Si tienes la oportunidad de admirar a alguna de estas especies en su entorno natural, respeta las distancias, no hagas ruido y procura no realizar movimientos bruscos que puedan resultar amenazantes para ellos. 

Si tienes la oportunidad de viajar a la Antártida, no lo dudes más. Se trata de una experiencia única en la vida que te alejará del mundo conocido y caótico que nos rodea. Disfruta del silencio que allí reina y abrígate bien. Se trata de un viaje extremo repleto de sensaciones que nunca podrás olvidar. 

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