La laguna bioluminiscente de Oaxaca

A menudo, el mundo nos sorprende con paisajes increíbles y escenarios naturales en los que la realidad supera a la mejor de las ficciones. Así nos ha ocurrido con la laguna de Manialtepec, un paraje surrealista en el que los viajeros disfrutan de un espectáculo natural único: ¡la orilla de esta laguna mexicana brilla al caer la noche! ¿No te lo crees? Sigue leyendo y descubre la explicación y cómo puedes visitarla.

La laguna de Manialtepec se encuentra a 15 minutos de Puerto Escondido, en el estado de Oaxaca, en México; dirección a la Pinotepa Nacional. Tiene una extensión de unos seis kilómetros cuadrados y su mejor cualidad es la de ser uno de los pocos lugares del mundo en los que se puede observar el fenómeno de la bioluminiscencia. Esto quiere decir que, cuando se ha puesto el sol, con el más leve movimiento, el agua brilla de un color azul intenso. Se trata de un lugar único en el que darse un baño nocturno o disfrutar de actividades como un paseo en kayak.

¿A qué se debe este color azul?

La bioluminiscencia es un fenómeno habitual en la naturaleza. El caso más conocido es el de las luciérnagas, pero también ocurre con otros seres como hongos, insectos o crustáceos. En este caso, resulta mucho más llamativo, ya que ocurre en el agua, pero la explicación es similar: los millones de microorganismos que viven en la laguna, una especie de plancton que proviene del mar y se reproduce en esta zona, produce una reacción química cuando se mueve, que sirve para protegerse de sus depredadores. Desde luego, esto no surte el mismo efecto con las personas, que se quedan maravilladas con el efecto de los puntitos de luz azul moviéndose al ritmo de las olas en la orilla.

¿Qué momento del año es mejor para visitar la laguna Manialtepec?

Los mejores meses para observar de cerca este fenómeno son los que van de mayo a noviembre, durante la época de lluvias.

Un lugar para amantes de las aves

Además de su llamativo baile de pequeños puntitos azules, este rincón de México es el lugar ideal para quienes disfrutan con las aves, ya que es el hogar de gran número de especies. Loros, patos, garzas… Todos se encuentran durante las primeras horas del día, para deleite de los fotógrafos más o menos profesionales que se encuentran en Manialtepec.

Para todos aquellos que se animen a conocer este lugar en persona, solo nos queda una recomendación: disfrutad sin tecnología o cámaras de fotografía. De lo contrario, en algún momento descubriréis que la bioluminiscencia solo se puede captar con equipos de fotografía profesional especiales y que habréis perdido un tiempo de lo más valioso y una de vuestras experiencias más inolvidables.