Viaje a Andorra: lagos, valles y montañas
Este pequeño, pero encantador país de los Pirineos cuenta con un peculiar atractivo que hace de él el destino perfecto para unas tranquilas vacaciones. Andorra es como una pequeña aventura para todas las edades. En sus montañas puedes encontrar actividades para todos los gustos. Desde bajar por grandes toboganes, recorrer impresionantes circuitos en tirolinas y hasta realizar rutas en 4×4. Y es que nuestro país vecino se halla en una situación envidiable rodeado de hermosos paisajes montañosos. ¿Qué esperas para preparar tu viaje a Andorra este año? Esto es todo lo que te espera.
Estas vacaciones viaja a Andorra y descubre su increíble naturaleza
Si tenemos que hablar de la naturaleza de Andorra, es imprescindible que sepas que este país es todo un referente para los amantes del aire libre. El 90% de su superficie es naturaleza pura, estando el 10% del mismo declarado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Emprender un viaje a Andorra también supone la posibilidad de disfrutar de sus tres parques naturales: el de Madriu-Perafita-Claror, el del Valle de Sorteny y el espacio de los Valles del Comapedrosa. ¿Empezamos la aventura?
Qué ver en Andorra
Andorra es el país favorito de los amantes de la nieve. Sin embargo, tu viaje a Andorra te encantará por muchos otros motivos. Además de practicar senderismo y rutas de montaña, te recomendamos que te dejes enamorar de otros encantos que también hallarás cuando pases tus vacaciones en Andorra. Toma nota.
Andorra la Vella
La capital de Andorra se halla situada a más de 1000 metros de altura, por lo que se encuentra rodeada de hermosos paisajes de montaña. Esta ciudad posee un centro histórico muy bonito por el que puedes pasear admirando sus edificios de piedra, entre los que destaca la Casa del Vall, uno de los parlamentos más antiguos de Europa. Otros rincones que también puedes visitar en Andorra la Vella son la Casa Guillermó, la Casa Felipó, la iglesia de San Esteve y la Plaça del Poble con la escultura “Homenaje al inmigrante”.
Iglesias románicas de Andorra
Aunque Andorra sea un país pequeño, posee una riqueza cultural y monumental muy vasta. Esto se puede apreciar en la cantidad de iglesias románicas con las que te puedes topar a lo largo de su territorio. Aquí existen unos 50 monumentos románicos en muy buen estado de conservación, construidos entre finales del siglo VIII y el XIII. Una de las características comunes de todas ellas son sus campanarios de forma cuadrada. Entre las iglesias románicas que no te puedes perder se encuentran la iglesia de Santa Coloma, la de Sant Miquel d’Engolasters, la de Sant Climent de Pal y la de Sant Joan de Caselles.
Las aguas termales de Caldea
Has de saber que en Andorra hay más de 35 fuentes naturales con potentes efectos sobre la salud. El balneario de Caldea, en concreto, es uno de los lugares más populares de Andorra. Sus aguas afloran a 70ºC y son ricas en sulfuros, minerales y plancton termal. Todo ello, las convierte en unas aguas con multitud de propiedades medicinales. Caldea obtiene sus aguas de las fuentes de Escaldes-Engordany, las más cálidas de todos los Pirineos. Aquí podrás disfrutar de una jornada de lo más relajante entre saunas, jacuzzis, baños turcos, etc.
Lagos de Tristania
Estamos ante tres lagos de alta montaña que nos ofrecen uno de los paisajes naturales más hermosos de Andorra. Aquí puedes emprender una ruta de dificultad media, apta para senderistas de todos los niveles. Una vez allí, descubrirás un lugar en perfecta convivencia con la naturaleza y una zona de baño perfecta para los meses de verano. El primer lago con el que te encontrarás en esta ruta es el lago Primer, cuyas aguas son las más azules. A continuación, te toparás con el lago del Mig, que se encuentra rodeado por collados y canchales. Y, finalmente, el lago de Més Amunt, de mayor tamaño enmarcado en un singular entorno glaciar.
Los museos de Andorra
Si te gusta la cultura y aprender cosas nuevas cuando viajas, no puedes dejar de visitar museos andorranos, tales como, el Centro de Arte de Escaldes-Engordany, dedicado al escultor Josep Villadomat, el Museo del Perfume, el Museo del Automóvil o el Museo del Tabaco, entre otros muchos más. Algunos de ellos, enclavados en un entorno que los hace más interesantes si cabe.
Puentes de Andorra
El románico también ayudó a la creación de puentes de piedra que se han convertido en otro reclamo turístico del país. El Puente de la Margineda, por ejemplo, es uno de los más llamativos. Se construyó sobre el río Valira en el siglo XII, por lo que es el más antiguo. Cuenta con 33 metros de largo y un único arco de albardilla de 9 metros y medio. Otros puentes interesantes son el de Sant Antoni de la Grella, el Pont dels Escalls y el Pont d’Engordany.
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